mueres, por que no
desfalleces ante las
armas que desgarran
mi alma.
Por que resistes las puñaladas
que inserto en mi pecho
¿es tan fuerte tu cuerpo
metafórico, como el
estuche que guarda
a tu doble corpóreo?
¿Cuanto mas resistirás
antes de condenarme
a vivir en ese estado
en que no siento
y soy libre de
tu gobierno?
¿De donde sacas esa
fuerza, te alimentas
solo de recuerdos?
valen tanto para ti
esos momentos, donde
estando a su lado
encuentras fugaz consuelo.
Aun sigues evitando
amores fugases,
buscas romance
y un eterno
te amo.
Corazón., descansa
cavada esta la tumba
y tu tarea cumplida
ya en esta vida
no requiero de
tu apoyo.
Ahora la rabia
se mostrara como
enojo, no como
suspiros o abrasos
callados.
De mis labios
saldrán palabras
que considero impuras
y mi cuerpo reflejara
a la bestia
que tu habías sellado.
Corazón, cede tu
puesto, deja que el
instinto me guié
hacia el riesgo
y así me lleve al camino
que tanto anhelo.
Corazón deja tu
reino, pues en ruina
haz dejado mi
cuerpo y bajo
tu mando el futuro
es incierto.
Corazón, quiero
vivir como un
guerrero y no
como el poeta
que murió en
tu lecho.
Domingo 15 de mayo del 2011
German Gomez
Croido Shibumi